Dificultad para respirar (Shortness of breath)
La dificultad para respirar, también conocida como falta de aliento o disnea, es la sensación de no poder obtener suficiente aire para respirar. Puede ser causada por el cáncer, los efectos secundarios de los tratamientos contra el cáncer u otros problemas de salud.
Es importante averiguar qué está causando la dificultad para respirar y cómo se puede tratar.
Sepa qué esperar
Hay muchas razones por las que las personas con cáncer puedan tener dificultad para respirar. Pregúntele a su médico si es probable que esto le suceda y qué puede hacer para controlarlo.
Comprenda sus medicamentos para la falta de aire
Si tiene un inhalador, asegúrese de saber para qué es y cómo usarlo.
Comience un diario de síntomas
Vigilar sus síntomas puede ayudar a usted y a su equipo de cuidado del cáncer a manejarlos mejor.
Cada día, escriba los síntomas que tiene, la hora cuando los tiene, cuánto duran, y qué tan fuertes son. También puede anotar lo que usa para aliviar los síntomas, y qué tan bien funciona.
Sepa a quién contactar si tiene un problema
Su médico o enfermera es la mejor persona para consultar si tiene preguntas o inquietudes sobre su tratamiento.
Pregúntele a su médico o enfermera:
- cuando debe llamar para pedir ayuda o consejo
- a quién debe contactar
- cómo contactarlos (incluyendo durante la noche o fines de semana).
Mantenga esta información donde pueda encontrarla fácilmente.
Manejo de la dificultad para respirar
La falta de aire leve a moderada puede aparecer y desaparecer. Suele mejorar con reposo y ejercicios de respiración sencillos.
Si su dificultad para respirar no mejora, contacte a su médico o equipo de cuidado del cáncer. Pregúnteles qué está causándola y qué se puede hacer para aliviarla.
Dificultad grave para respirar
Si tiene una repentina dificultad para respirar que le dificulta hablar, necesita atención médica.
Use los números de contacto que recibió. Si no logra contactar a alguien, vaya a la sala de emergencias del hospital más cercano para que lo evalúen.
Cambios de tratamiento
A veces, si tiene síntomas graves, su médico puede considerar retrasar o cambiar su tratamiento.